Здавалка
Главная | Обратная связь

B) Contesta a las preguntas.



1. ¿De dónde había llegado P. Alarcón a Valencia para embarcarse en el vapor que partía a Marsella? 2. ¿Qué sociedad halló a bordo? 3. ¿Cómo eran los franceses? ¿Y los zuavos? 4. ¿Y los mahometanos, qué hacían? 5. ¿Adonde se dirigían las hermanas de la Caridad? 6. ¿Qué le trajo a la memoria toda esa gente? 7. ¿Adonde fue después de contem­plar a los pasajeros del Phillippe Auguste? 8. ¿Se durmió pasado largo rato? 9. ¿Por qué se durmió tranquilamente? ¿Acaso no era peligrosa la travesía? 10. ¿Dónde pasó el autor la segunda noche de navegación? 11. ¿Qué contemplaba desde la cubierta del buque? 12. ¿A qué comparaba aquellas enormes masas de agua que se deslizaban bajo sus ojos? 13. ¿Qué paisajes vieron los pasajeros del buque a la mañana siguiente? 14. ¿Qué aspecto tenía el puerto de Marsella aquel día? 15. ¿Le costó mucho trabajo al piloto elegir sitio para el Phillippe Auguste?

d) Haz por escrito la traducción de los párrafos que te han gustado sobre todo.

3. a) ¿Tienes mareos durante los viajes? Ahora tendrás la posibilidad de enterarte de los remedios que pueden ayudar en tales casos. Lee la información siguiente.

El mareo del viaje

El término mareo va enormemente ligado al término viaje. Aproximadamente la mitad de la población sufre cada año y durante las vacaciones de verano el denominado mareo del viajero.

Entre los medios de transporte es el barco el que tiene unos índices de mareo en los viajeros más alto, afectando entre el 55 y el 70% de éstos. Esto se debe a que este medio de transporte es el más inestable y el que más se expone el individuo al movimiento. El tamaño de la embarcación, el estado del mar y la experiencia adquirida en viajes anteriores son factores que también influyen en el mareo del viajero marítimo.

Los autocares, en sus trayectos por las carreteras, también ofrecen altos índi­ces de mareos en los viajeros. Entre un 45 y un 55% de la población se marea en este medio de transporte. Los automóviles le siguen, aunque a larga distan­cia. El número de afectados por el mareo en los viajes disminuye considera­blemente en los aviones, siendo únicamente un 1% de la población la que se marea en este medio. Según los expertos, el tren es el medio de transporte que registra un porcentaje más bajo de mareos.

CAUSAS DEL MAREO

La gente se marea fundamentalmente porque los impulsos nerviosos que llegan desde los ojos al cerebro padecen una disfunción o conflicto, que hacen que se pierda la estabilidad y el equilibrio respecto a la vertical que regula el laberinto del oído. Así, cualquier alteración ocasionada por aceleraciones y desaceleraciones angulares y lineales repetidas, como las debidas a desplazamientos por mar, tierra o aire, así como el balanceo constante, pueden desembocar en los síntomas propios del mareo del viaje: pérdi­da del equilibrio, náuseas, frío, sudor, vómitos, desmayos... En unas personas puede presentarse de una manera y, en otras, de otra.

El mareo se da más entre las mujeres que entre los hombres, aunque es entre los niños de todas las edades en los que se da con mayor frecuencia el mareo. Esto se debe a que, desde su limitada perspectiva, observan que todo lo que les rodea se mueve violentamante, sobretodo si miran por las ventani­llas. La elevación de su cuerpo unos 20-25 centímetros basta para que puedan ver a través de la ventana delantera y mirar objetos en los que fijar la mirada.

EL MAREO DE LOS VIAJES

Este tipo de mareo se manifiesta con sínto­mas tales como la palidez en la cara, la hipersalivación, la inquietud, los boste­zos, las náuseas y las arcadas, que casi siempre preceden o acompañan el vómi­to.

Las náuseas implican una sensación de deseo inminente de vomitar, refe­rida en la garganta o en la parte superior del estómago. Por su parte, las arca­das consisten en contracciones rítmicas y forzadas de la musculatura respira­toria y abdominal. Finalmente, el vómito supone la expulsión violenta por vía oral del contenido gástrico.

TRATAMIENTO

Para la prevención y tratamiento del mareo de los viajes es recomendable el uso de medicamentos antihistamínicos de reconocida eficacia.

Cincuenta años después de su aparición en el mercado (1952), Biodramina es la marca genérica en la prevención y tratamiento del mareo del viaje. En muchas ocasiones, su uso resulta imprescindible para disfrutar de un viaje placentero.

RECOMENDACIONES PARA NO MAREARSE

1. En caso de iniciar un viaje largo haz una comida ligera. Si el viaje es corto y eres propenso a los mareos es mejor que no comas nada: las comidas abun­dantes, además de favorecer el mareo, producen somnolencia y pueden mermar la atención del conductor.

2. Intenta dormir bien siempre antes de realizar cualquier viaje.

3. Procura no leer ni realizar actividades que te obliguen a fijar la vista.

4. Es importante que el vehículo esté bien ventilado. Evita el humo del tabaco y los olores fuertes.

5. Procura no acelerar ni dar frenazos de forma brusca, ni tomar las curvas a gran velocidad.

6. Descansa cada dos horas más o menos, tomándote el tiempo que necesi­tes para pasear y airearte. Siempre que estés mareado, para el coche y date un paseo para airearte.

7. Si sientes un malestar inicial realiza inspiraciones profundas y rápidas para aliviar la sensación de náuseas.

8. En el síndrome de adaptación al espacio, el movimiento agrava los síntomas. Si estás mareado intenta mantener la vista fija y no en objetos móviles. Si no vas conduciendo recuéstate con la cabeza hacia atrás o adopta la postura de decúbito supino.

9. Si el ángulo de visión se mantiene a 45º por encima del horizonte se reduce la predisposición al mareo.

10. No hagas giros bruscos de cabeza, en parti­cular hacia un lado y abajo.

11. No bebas alcohol antes ni durante el viaje, ya que aumenta la probabilidad de mareo. Lo mejor es beber agua mineral sin gas.

12. Los medicamentos contra el mareo (antie­méticos) son preventivos. En general, con tomarlos una hora antes del viaje es suficien­te, aunque, eso sí, ten en cuenta que producen sedación y dismi­nuyen el nivel de alerta, por lo que si vas a conducir procura evitarlos.

PARA VOLAR Y NAVEGAR

1. Durante los vuelos se produce un vaciamiento más lento del estómago por lo que las digestiones se hacen más lentas y se puede producir acidez y pesa­dez de estómago. Además, al reducirse la secreción de ácido al estómago las comidas copiosas son difíciles de digerir. Un buen menú sería aquél elabo­rado a base de hidratos de carbono (pasta), carne, queso y fruta. Las verdu­ras flatolentas como la col o la coliflor deben evitarse.

2. En barcos y aviones busca siempre las zonas de menor movimiento como pueden serlo el centro del barco o entre las alas del avión.







©2015 arhivinfo.ru Все права принадлежат авторам размещенных материалов.